El líder social afrocolombiano y defensor de derechos humanos, Dagoberto Pretel y la comunidad del litoral del Bajo San Juan, en Chocó, que actualmente se encuentra desplazada en el Coliseo de Buenaventura, fueron amenazados de muerte.
A través de una llamada telefónica, mientras se encontraban en una reunión comunitaria, un hombre les afirmó que tanto la vida del líder como la de la comunidad “corrían peligro” debido a sus intenciones de retornar al territorio.
Por su parte, el Estado colombiano además de dilatar la respuesta de retorno ha dejado de responder humanitariamente a las familias afrocolombianas, la mayoría de ellos niños y niñas que viven en hacinamiento y condiciones infrahumanas.
Las 32 familias de Cabecera debieron desplazarse forzadamente en abril de 2017, luego de que presuntos integrantes de la guerrilla del ELN incursionaran en la comunidad de Carra, Municipio de Litoral de San Juan, Chocó y asesinaran 5 personas. La comunidad de Cabecera ha estado estigmatizada ya que en años anteriores parte de su territorio fue utilizado por estructuras paramilitares de los urabeños para controlar el tráfico de Droga en el Bajo San Juan y la exigencia de que se retiraran generó amenazas. Las familias le han exigido al gobierno garantías para su retorno, sin recibir respuestas precisas. El pasado 1 de febrero debió realizarse el Comité de Justicia Transicional para definir fecha y compromisos de retorno, pero la institucionalidad local unilaterlamente canceló la cita.
Desde Contagio Radio de Bogotá - Colombia, nuestro compañero Santiago Lozano nos informa:
Fuente: Contagio Radio
Foto: Justicia y Paz