A orillas del lago navegable más alto del Mundo, el Titicaca, comunicadores quechuas y kichwas venidos del Kollasuyo, el Antisuyo y el Contisuyo se reunieron en la ciudad de Puno en el Encuentro de Comunicación de la Red Kiechwa Satelital.
Coincidente con la fiesta del Inti Raymi, la fiesta del sol, los comunicadores y comunicadoras de la Red Quechua de Bolivia, Perú y Kichwa de Ecuador iniciaron su trabajo el día 24 de junio acompañados de una brisa helada, propia de la estación invernal peruana.
El "signos del buen vivir en la vida de nuestros pueblos" fue la frase motivadora que, desde el saque incitó a un diálogo permanente durante los tres días del encuentro. Necesitaban hablar, necesitaban verse, necesitaban decirse las cosas en la cara. Hace más de dos años que no se encontraban y Puno fue el tubo de escape de esos sentimientos acumulados.
Sabían que las cosas en la RKS no estaban yendo del todo bien y, por eso, en el primer día de trabajo, luego de pintar la realidad de los pueblos quechuas y kichwas de Ecuador, Bolivia y Perú, se sumergieron, a su estilo, en las críticas frontales y en los mea culpa colectivos. Evaluaron la organización y gestión, la producción radiofónica y la incidencia. Este último aspecto fue el menos favorecido. Autocríticamente reconocieron que las dificultades organizativas y de gestión estaban pasando factura en la capacidad de incidencia de la RKS. Sin conexión sostenida con los pueblos originarios y sus organizaciones todo esfuerzo de producción radial será limitado.
El segundo día de trabajo, en la previa a la revisión de la agenda comunicativa de la RKS, fue necesario, y después altamente valorado por los y las compañeras, la revisión de la "Carta desde el futuro de ALER al 2020". Su lectura despertó reflexiones interesantes como el hecho de señalar que la carta encamina la actuación de la RKS. La brújula, el faro está ahí y no la conocíamos señaló uno de los compañeros. Una alerta a nuestros directivos y la secretaría ejecutiva para multiplicar esfuerzos y lograr que el ALER 2020 llegue hasta la última vena de la organización.
Después vino la discusión de la agenda. A la luz de la revisión de los resultados del Taller sobre pueblos originarios y afros que se desarrolló en el Seminario Internacional por los 40 años de ALER, los quechuas y kichwas discutieron y armaron su propia agenda. Tres temas centrales van a guiar su actuación en el próximo periodo: Buen Vivir, derechos de la naturaleza y derechos vulnerados de los pueblos indígenas. Trazaron los contenidos para cada tema, los actores con quienes se va a trabajar y el enfoque en el tratamiento de los temas.
Con estos insumos, sumando los antecedentes de la RKS, así como el estudio de la programación radiofónica de la RKS, tuvimos el último día de trabajo, el 26 de junio, dedicado íntegramente a la planificación. En tres grupos se empezaron a tejer los acuerdos y compromisos en organización, producción, formación e incidencia. La formación de un Comité de Coordinación de la Red, la constitución de un comité que elabore un manual de funciones y reglamento de organización así como de mercadeo; la visibilización de la red RKS en eventos de carácter local, nacional y regional para garantizar incidencia y articulación con organizaciones, son parte de los acuerdos del Encuentro de Puno.
Una visita rápida pero sentida a Radio Onda Azul, un paseíto al lago a visitar a los Uros que viven en islas flotantes y un alto en el trabajo para alentar y gritar a un Ecuador que no pudo saltar por encima de Francia en el mundial, marcaron este encuentro de quechuas y kichwas que hablan con las manos, que se comunican cuando se tocan. Tienen inoculado en la sangre el poder de la emoción. El intelecto es un abstracto. Nos vimos en el techo de la cordillera para darnos fuerza, para renovar compromiso y para establecer complicidades en torno al deseo común de seguir construyendo el nuevo Inkary; la nueva sociedad del Allin Kausay como lo llaman los quechuas peruanos.
Hugo Ramírez Huamán
Coordinador Redes
ALER