Canadá anunció que irá adelante con la expansión del Oleoducto Trans Mountain, en el oeste del país. Pueblos indígenas y grupos ambientales denuncian que el proyecto no es compatible con el discurso de reconciliación con los pueblos originarios y de urgencia climática del gobierno.
Para el gobierno canadiense no hay contradicción, pues afirma que la venta del petróleo del oleoducto, financiará la transición ecológica del país.
Los pueblos originarios se oponen al proyecto desde los años 50, desde la implantación de la primera tubería. En el 2018, grupos de guerreros y guerreras volvieron a organizarse para impedir su expansión.
La información desde Comité por los Derechos Humanos en América Latina (CDHAL) con Jessica Ramos.
Fotografía: oilprice.com