En la provincia de Loreto, región amazónica de Perú, la empresa canadiense de hidrocarburos Frontera Energy ha afectado la salud y los modos de vida de tres pueblos quechua, achuar, Kichwa. Ante ello, comunidades afectadas se unieron para paralizar la producción, exigir justicia y recuperación del área.
Según el Organismo Estatal de Fiscalización Ambiental, desde que Frontera energy empezó a operar en octubre de 2015, se registraron un promedio de 25 derrames por año, la mayor parte de ellos debido a la corrosión de los ductos y las fallas técnicas.
Esta empresa se ubica en el Lote 192, conocido como el mayor yacimiento petrolífero de Perú, responsable por el 17% de la producción nacional. En 2015, Frontera obtuvo las concesiones pese a la fuerte oposición de las comunidades. Éstas denuncian que el gobierno del presidente Ollanta Humala no llevó a cabo la debida consulta previa, libre e informada. Además, no se consideraron los impactos que otras empresas habían causado en la misma región desde hace 50 años.
La información desde Canadá, para Contacto Sur, reporta Rosalinda Hidalgo del Comité por los derechos humanos en América Latina, CDHAL.
Fotografía: Rumbo Pequeño