Se trata del decreto 591/2019 firmado el 27 de agosto, que para las organizaciones sociales deja a Argentina como “basural del mundo”.
Esta modificación permite la importación de basura desde el exterior. Es decir, que se podría traer para la industria materia prima de otros países como cartón, plástico y demás, que como consecuencia deja sin trabajo a las personas que reciclan.
En Argentina hay alrededor de 200.000 cartoneros y cartoneras en todo el país que recuperan diariamente 10.000 toneladas de residuos, de acuerdo a datos de la Federación de Cartoneros. Trabajan en la calle y en los basurales con creciente organización, pero sin acompañamiento del Estado.
Para Laura Cibelli referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE): "No puede ser que traigamos del exterior lo que nosotros producimos diariamente como pueblo. Estamos hablando de un kilo de basura por persona, por día lo cual un 30 o 40% puede ser reutilizado”, mencionó.
Los residuos son un problema por su enorme producción y un negocio cooptado por ciertas empresas que pujan por adjudicarse su recolección y tratamiento. Pero los residuos también son un problema de hábitat y sanitario cuando no se regulan.
Información desde FARCO con reporte de Resistencia de La Plata
Fotografía: FARCO