En Dakota del Norte, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército anunció que prevé impedir el acceso del público al lugar donde está instalado el campamento de protesta de Standing Rock a partir del 5 de diciembre.
Durante meses, los protectores indígenas del agua han estado acampando en la zona para luchar contra el oleoducto Dakota Access, valuado en 3.800 millones de dólares, que transportaría petróleo crudo de los campos petrolíferos Bakken de Dakota del Norte y pasaría por Dakota del Sur, Iowa e Illinois.
En una declaración publicada el domingo, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos afirmó que “no se tiene previsto expulsar por la fuerza” a los manifestantes, pero la agencia afirmó que toda persona que permaneciera en el lugar se consideraría no autorizada y podría estar sujeta a varias citaciones.
El jefe de la tribu sioux de Standing Rock, dijo en una declaración que la tribu estaba “enormemente decepcionada” por esta decisión.
Fuente: Democracy Now