En Colombia, las organizaciones sociales tienen un rol clave en la defensa del territorio y una gran responsabilidad de consolidar lo rural como un espacio de vida que permita producir para garantizar la soberanía alimentaria. Pese a esto y como en la mayoría de los países de la región, las condiciones de vida en estos territorios son bastante complejas. La encuesta de calidad de vida del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE, 2019) muestra que la pobreza multidimensional alcanza al 12.3% de la población urbana y el 34% de la población rural. La inequidad que afecta principalmente al territorio rural, da cuenta de la necesidad de apoyar y fortalecer políticas de educación y capacitación como la mejor apuesta para superar las brechas.
En este contexto, el proyecto Jóvenes Rurales promueve en Colombia varias iniciativas formativas que permitan valorar la educación como alternativa para transformar el territorio rural, entre ellas al Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), en la realización de una malla curricular para técnicos en Desarrollo Rural, construida con metodologías participativas y adaptadas a la realidad de los territorios rurales. Brinda apoyo al Comité de Integración del Macizo colombiano (CIMA) especialmente en el fortalecimiento de su proceso de formación en agroecología; así como a Escuela Taller Tumaco, para dar visibilidad a la experiencia impulsando a emprendedores rurales.
Este proyecto incentiva a los y las jóvenes que viven en la ruralidad para que su educación y formación técnica, puedan contribuir con el desarrollo económico, social y cultural de sus territorios, fortaleciendo así a la cultura campesina.
El proyecto Jóvenes Rurales cuenta con el apoyo del Ministerio Europeo y de Asuntos exteriores de Francia. Liderado por FranceAgriMer y France Volontaires, coordinado por el Ministerio de Agricultura y la Alimentación de Francia y operado por Agrónomos y Veterinarios sin Fronteras AVSF.
Producción: Contagio Radio